El género de terror se ha visto plagado de cintas que hablan de las posesiones demoniacas, desde las de gran calidad que se han convertido en cintas de culto como El Exorcista o el Conjuro hasta cintas que no hacen nada más que dejarnos con la extraña nostalgia del cine de terror de los 70’s y 80´s pero ahora llega la cinta del director Xavier Gens donde lo más importante es que no pretende nada, sino que nos cuenta una historia suculenta en una locación como Rumania, y se debate entre la fe y el no creer, aunque la cinta no plantea nada nuevo, es este respeto al género lo que la hace sobresaliente, sin caer en el Gore o la exageración de los efectos especiales la cinta cuenta la historia de una monja que muere durante un exorcismo, el padre junto con cuatro personas más es encarcelado culpándolos de ser los homicidas, una periodismo que es escéptica al tema investiga si este padre es culpable o no, los sustos son auténticos y aunque el enlace es predecible la cinta se posiciona como una buena opción para disfrutar este fin de semana.
POR : BEATRIZ NAVARRO
